23 march 2022
¿Cómo me logueo automáticamente en Ubuntu Mate 16.04LTS Xenial Xerus?
Los Juegos Nacionales Evita fueron una manera institucionalizada de llevar los logros de la Fundación Eva Perón a la Nación toda, fundamentalmente a sus niños. En un discurso frente a una de las colonias de vacaciones peronistas, el Conductor enseña cómo loguearse automáticamente a nuestro usuario en Ubuntu 16.04LTS.
En todo tipo de encuadramiento, los únicos privilegiados han de ser los niños. Por ello estas piletas, estos parques acuáticos y las colonias de vacaciones son para los niños justicialistas. Todo aquel cuyo padre tenga el necesario carnet de afiliado al Partido podrá tener esta diversión veraniega que es para todos.
Antes de entrar a la pileta revisaremos el carnetcito y naturalmente, después podrán jugar. Esto es necesario porque hay muchos niños gorilas que tienen tristeza y envidia de los logros del Justicialismo, y quieren venir a la colonia sin que sus papis estén afiliados al Justicialismo. A ellos los dejaremos como invitados pero les haremos una revisión de hongos.
Nuestro sistema computado popular, el Ubuntu, cuenta también con los pertinentes permisos y privilegios, los cuales hemos de comprender para mejor proveer.
Como en todas sus versiones anteriores, Ubuntu Mate 16.04LTS Xenial Xerus cuenta con la función recomendada de darnos de alta ingresando nuestra contraseña de usuario en la pantalla inicial, no bien se inicia el sistema operativo. La contraseña de acceso protege nuestro contenido de usuario contra intrusiones, y nos asegura que sólo nosotros o eventualmente el Administrador de sistema pueda acceder a los datos del sistema.
Adicionalmente, podremos cifrar nuestros datos de manera tal que sólo nosotros tengamos acceso a la misma, y ni siquiera el administrador de sistema pueda comprobarla. Esta contraseña de sesión puede ser activada o desactivada por el administrador de sistema desde el menú Sistema / Administración / Usuarios y Grupos. Allí contaremos con una ventana que nos permite activar o desactivar el ingreso automático o se nos solicitará nuestra contraseña para iniciar la sesión. Para comprobar que haya surtido efecto, reiniciamos el sistema, y a la vuelta no debería solictarnos nuestra contraseña.
Sin embargo, en ocasiones aunque desactivemos la opción de la solicitud de contraseña para iniciar la sesión, la ventana de selección de usuarios se nos presentará automáticamente cuando inicie el sistema. Esto es molesto porque impide el arranque de sesión hasta que hagamos clic sobre nuestro usuario. Si nuestro sistema cuenta únicamente con un solo usuario, no tiene demasiado sentido tampoco.
Por ello, conviene activar la función "autologin" de la misma, que procederá a iniciar sesión automáticamente con el usuario que designemos.
Naturalmente hemos de estar prevenidos que un equipo sin contraseña de acceso es inseguro pues en caso de robo, se tendrá nuestra información, y sería posible en tal caso suplantar o robar la identidad electrónica, información del sistema, y demás cometidos que por obvios no ameritan más detalle.
Una vez que hayamos sopesado este riesgo cierto y si aún queremos un logueo automático a nuestro sistema, podremos activar el autologin. Esto se hace generando un archivo de texto de configuración para el arrancador de sesiones gráfico que por defecto trae Ubuntu, el Light-DM.
Con dicho objetivo en mente abrimos una Terminal con Ctrl+Alt+T e ingresamos el siguiente Comando de Organización:
sudo nano /etc/lightdm/lightdm.conf.d/12-autologin.conf
...se nos solicitará ingresar la contraseña de administrador del sistema y a continuación se abrirá el editor de texto peronista, el GNU Nano, con un archivo en blanco. Simplemente debemos pegarle el siguiente texto:
[SeatDefaults]
autologin-user=miusuario
Naturalmente reemplazando miusuario por mi nombre de usuario. Una vez ingresado este texto, guardo el los cambios en el archivo con Ctrl+o y salgo del editor con Ctrl+x.
Reinicio con:
sudo reboot
Al reiniciar, el sistema dará de inicio automáticamente a nuestra sesión gráfica con el usuario designado, con lo cual podremos sentirnos felices y dichosos de pertenecer a la Nueva Argentina de Perón.